Al menos nueve personas muertas, y unas cuantas más heridas, fue el saldo provisional del tiroteo que se produjo en un centro comercial de la ciudad de allenes Texas. Allí se encontró un español llamado Xavi Cano Gallegoque es entrenador del North Texas Soccer Club de la MLS Next Pro (3ª división de EEUU). Estaba acompañada de su mujer y su hija de 22 meses. Relató lo sucedido en el programa ‘Carrusel’ de la Cadena SER.
«Fue un horror. Creo que fueron 30 segundos lo que nos distanció entre entrar a la tienda y comenzar todo, de estar vivo o estar muerto. Todo sucedió en la tienda de al lado. Me encontré con 5-6 cadáveres a la salida y al caminar en la esquina estaba el agresor muerto con un tiro en la cabeza”, afirmó.
Continuó contando que «nos escondimos en el almacén de una de las tiendas. Escuchamos todo y tuve que llamar a mi mujer que estaba viendo prendas de ropa. Imagínate. Más que temer por mi vida, temía por la de mi mujer y mi hija. No se lo deseo a nadie que lo pueda vivir así y más con las personas que más quieres y eso que tuve la suerte de que estábamos todos juntos. Sabes que si el tirador entra, posibilidades de sobrevivir utilizar muy pocas. Estábamos rezando para que no entrara, para que por favor se quedase fuera porque ese sufrimiento o ese no saber cómo podía reaccionar era muy difícil de soportar».
Xavi Cano explicó que «estábamos todos callados en máxima tensión para no llamar la atención del asaltante. Todo el que estaba al lado estaban cogidos de las manos. Tenía a mi mujer ya mi hija a mi lado, de cuclillas, a los niños los escondimos a todos en las bandejas del almacén donde guardan la ropa por si entraba, para que los blancos fuéramon nosotros, que terminara con nosotros y que ellos tuvieran más posibilidades de sobrevivir. También usaron las cámaras de las tiendas donde chequeábamos como se estaba moviendo».
Finalmente dije que «es increíble y da mucha rabia que puedas ir a un centro comercial y puedas comprar un rifle. Dicen que es para defenderse, pero ¿para defenderse de quien? No me genera ninguna seguridad. Un amigo me decía ¿Cómo puede ser eso en el país más avanzado del mundo? Es todo fachada. Ya no tengo seguridad de ir a un centro comercial, un cine o un desfile. Voy a tardar mucho tiempo en volver a un sitio o así», concluyó.
Lee también