Aficionados exigieron refuerzos, se quejaron de la directiva y criticaron a la presidenta Leila Pereira
Frente a más de 40.000 hinchas, Palmeiras terminó empatado sin goles ante So Paulo en la noche de este domingo (22), en Alliaz Parque. El mismo día del partido válido por el Campeonato Paulista, las paredes de la sede del club fueron pintadas en señal de protesta.
Las fotos del grafiti muestran las inscripciones «queremos jugadores» y «Leila cumple sus promesas», además de «despierta blogueirinha» y «gestión débil». En los últimos días, los aficionados disconformes con el hecho de que el Palmeiras aún no haya reforzado su plantilla han elevado el tono de las críticas contra el presidente.
