«¡Váyanse todos!”. El grito fue una expresión de bronca, un reflejo del fastidio acumulado, un síntoma más de un enojo que ya se torna inocultable en Independiente. El equipo quedó al borde de la zona de descenso tras la derrota ante Colón y podría haber heridos: el técnico, Ricardo Zielinski, suspendió su habitual conferencia de prensa y, en caliente, tenía ganas de presentar la renuncia. Y algunos integrantes de la comisión directiva pretenden que el manager, Pablo Cavallero, se marche de la institución, disconformes con la tarea de quien estuvo a cargo de los últimos dos mercados de pases.
Colón – 20-8-2023
El resumen de la victoria de Colón ante Independiente
Una vez finalizado el encuentro contra el Sabalero, un nutrido grupo de fanáticos se dirigió hacia el hall contiguo al vestuario local para manifestarse contra la dirigencia, los jugadores y el entrenador, quien durante el partido fue insultado por plateístas de la Erico. El Ruso pidió hablar con las máximas autoridades de la institución para manifestarles su intención de irse, pero los dirigentes más importantes ya se habían retirado.
Esteban Sáenz Rico, secretario deportivo del club, fue quien tuvo que escuchar la catarsis del técnico. El directivo le sugirió tomarse algunas horas para evitar tomar una decisión drástica en un momento de mucha angustia. El Ruso conversará hoy con quienes conducen el club y bajará el martillo. Desde su llegada nunca logró darle su impronta al equipo: cosechó seis triunfos, cuatro empates y ocho derrotas. Su equipo sumó 22 puntos de 54 posibles.
Cavallero también quedó muy debilitado. Un sector de la dirigencia quiere que presenta la renuncia cuanto antes. Le van a pedir que se vaya. El ex arquero tiene contrato hasta el 31 de diciembre. Independiente se prende fuego.