Rompió la sequía. Andrés Vombergar por fin pudo volver a hacer vibrar sus cuerdas vocales. El delantero de San Lorenzo convirtió después de 977 minutos sin gritos. Y lo hizo por duplicado, haciéndose cargo con mucha suficiencia de la ejecución de dos penales en los que la pelota quemaba.
“El tema de la racha lo llevé tranquilo. Dentro de todo el equipo venía funcionando. Por ahí los delanteros estábamos un poco secos, pero ahora se abrió un poco. Logramos mantener el cero, que para nosotros es algo importante. Ahora tenemos que disfrutar”, comentó el atacante de 28 años. Su último grito había sido el 11 de marzo, en la goleada a Gimnasia por 4-0.
San Lorenzo – 20-5-2023
La victoria de San Lorenzo ante Instituto
El punta no sólo tuvo un doblete, sino que además generó el penal del 1-0. El zaguero Fernando Alarcón lo golpeó en la nuca y el árbitro, Nicolás Ramírez, consideró que el contacto fue suficiente para desestabilizarlo en el aire. “Fue penal. Me pega con el codo en la cabeza. Es más: fue un claro penal. Por suerte lo pude convertir”, comentó Vombergar, absolutamente convencido de que hubo infracción.
El atacante nunca bajó los brazos. Y tuvo premio. En San Lorenzo lleva disputados 37 encuentros, de los que fue tituar en 26 y convirtió 11 goles. Este año la metió en cinco ocasiones, con la particularidad de que todos sus gritos fueron en el Nuevo Gasómetro: además de su doblete contra Instituto, la metió ante Arsenal (1-0), Unión (1-0) y en el mencionado choque ante el Lobo, que marcó el inicio de una prolongada e inesperada sequía que logró romper frente a la Gloria.
El Ciclón se arrimó a la cima
Con esta victoria ante los cordobeses, San Lorenzo se arrimó a apenas dos puntos del líder de la Liga Profesional, que esta noche recibirá a Platense. “Vamos tranquilos. Sabemos que todavía falta bastante”, comentó un prudente Vombergar. Y agregó: “Lo importante era mantener esta racha de local y seguir ganando. Era importantísimo para nosotros y para la gente seguir prendidos”.