El partido entre Boca y Estudiantes no ofreció mucho. Opaco 0-0 entre el team alternativo local y el Pincha. Fue el últmo partido de Xeneize antes de la esperada final de la Libertadores, el próximo 4 de noviembre ante Fluminense en el Maracaná. Y la Bombonera se hizo sentir.
Los hinchas de Boca se hicieron escuchar en el antes, el durante y el después. Y apelaron a una serie de hits puntuales. «En Río de Janeiro vamos a ganar, en Río de Janeiro vamos a ganar; y la vuelta, y la vuelta vamo’ a dar». Ese fue el primero que sonó, especialmente en el final del encuentro, ya con los jugadores yéndose al vestuario.
¿Otro? Un tanto más añejo (clásico en la época dorada de Carlos Bianchi) y, algo fuera de término teniendo en cuenta lo sucedido en la última década en la Libertadores y la propia sequía de Boca desde 2007: «Vamo’ a traer la copa a la Argentina, la copa que perdieron las gallinas, las gallinas». Sí, el recuerdo al clásico rival, eliminado prematuramente en octavos de final en la actual edición de la Libertadores. Curiosamente, un River que justamente amargó a Boca hace cinco años en la última final continental a la que lo de la Ribera accedieron. «Quiero la Libertadores y una gallina…», se agregó, algo ya más agresivo.