El gol de Talleres que postergó la consagración de River como campeón de la Liga Profesional se generó de manera insólita. Joaquín Novillo, zaguero de Huracán, se demoró con la pelota en los pies y la perdió a manos de Garro. El atacante de la T se la quitó, encaró y asistió a José David Romero, quien convirtió con Chaves casi sin chances de bloquear el remate.
Novillo está a préstamo en el Globo, cedido por Belgrano, el clásico rival de Talleres. A fin de año debería regresar al Pirata.
Al final, fue parte de las reprobaciones de los hinchas del Globo tras la nueva derrota, la cuarta al hilo por 1 a 0, que complicó la lucha del equipo de Diego Martínez para evitar el descenso.