Las agujas del reloj siguen corriendo y River, que sabe que no tiene mucho tiempo más para tratar de abrochar a sus refuerzos -el libro de pases cierra el viernes a las 20-, se topó con un disgusto: Luciano Rodríguez, atacante del Liverpool uruguayo con el que pretendía suplir la baja del Pity Martínez, está a detalles de firmar su salida al Feyenoord.
En algún punto, esperable: cuando Enzo Francescoli le acercó una oferta de siete millones de dólares por el 60% de la ficha a José Luis Palma, presidente del conjunto celeste, lo hizo sabiendo que corría de atrás ante el interés de algún club del Viejo Continente. ¿La gran chance? Que una salida a la Argentina supusiera un mejor negocio o una posibilidad de trampolín para después ser socios en una futura venta a Europa. Pero la billetera neerlandesa hablaría sola…
El Feyenoord está dispuesto a desembolsar una cifra cercana a los 14 millones de dólares por el 70% del pase del atacante de 20 años, que en caso de concretarse sería la venta más cara en la historia del fútbol uruguayo (de momento, lo es la de Sebastián Coates por 12 millones de euros entre Nacional y el Liverpool inglés).
Mientras disputa el Preolímpico Sub 23 con la selección charrúa -este martes se enfrenta a Perú-, en Uruguay se comenta que el pibe ya dio el okay para trasladarse a Paises Bajos, donde lo marcan como «el hombre elegido» para reforzar al equipo de Rotterdam. Aunque con algunas dudas…
En Países Bajos tienen dudas en torno a Luciano Rodríguez
«Este es el hombre (¿sin embargo?)», fue la portada del diario neerlandés Sportwereld, que si bien afirmó que el Feyenoord «quiere llegar lejos para hacerse con Luciano Rodríguez» sembró la incógnita en torno a lo que pueda aportarle al equipo: «Las altas expectativas no siempre son garantía de éxito».
Mientras tanto, los enviados del conjunto neerlandés se encuentran en Punta del Este puliendo detalles para ponerle fin a la negociación con esta perla uruguaya. Y River se agarra la cabeza…