El abismo fiscal programado para las cuentas públicas brasileñas este año, con una deuda pública que alcanzó el 90% del Producto Interno Bruto (PIB) y un escenario de crisis económica agravada por la pandemia del covid-19, ha motivado un debate más nacional con una mirada amplia sobre la legalización de Apuestas Deportivas. La regularización de juegos se ha discutido durante casi tres décadas en Brasilia, considerando el proyecto de ley 442/1991, que se está discutiendo en el Congreso, pero nunca ha sido tema de discusión entre los parlamentarios. Aunque muchos brasileños son expertos en la práctica, la legislación nacional sigue siendo ineficaz para absorber esta demanda de la sociedad.
El principal argumento de los parlamentarios a favor es la recaudación que se generará con el pago de impuestos sobre el juego legal, que reforzarían las arcas públicas en un momento de escasez de recursos y podrían dirigirse a Bolsa Família, o para implementar la Renta Ciudadana. propuesta. Actualmente, parte de los ingresos obtenidos de las loterías, por ejemplo, se revierte a acciones sociales, como FIES, un fondo de financiamiento estudiantil que mantiene el Ministerio de Educación.
El senador Ângelo Coronel (PSD-BA) es uno de los defensores de la legalización. Sostiene que la medida, de aprobarse, sería fundamental para ofrecer empleos, incrementar los ingresos federales y legalizar una práctica que ya está ocurriendo en el país, pero de manera ilegal.
Hay cuatro propuestas en el Senado Federal sobre la legalización de las apuestas deportivas en Brasil. El más avanzado, listo para la agenda del pleno, donde los senadores dan su voto para cada asunto, es el Proyecto de Ley del Senado (PLS) 186/2014, del senador Ciro Nogueira (PP-PI), que autoriza la explotación de “Juegos de la fortuna”. , online o presencial, en todo el territorio nacional, incluyendo casinos en complejos de ocio.
También está la PL 2.648 / 2019, del Senador Roberto Rocha (PSDB-MA), que autoriza la apertura y operación de casinos en resorts o complejos de ocio integrados. Según el texto, los casinos podrán operar en hoteles de alta gama, que ofrecen servicios como spas, áreas deportivas o de ocio, discotecas, museos, galerías de arte, parques temáticos o acuáticos, espacios para reuniones y eventos sociales. , culturales o artísticas, restaurantes, bares y centros comerciales.
Los parlamentarios que se oponen al lanzamiento de las apuestas deportivas advierten que la práctica puede agravar los problemas de salud, con el alto costo del tratamiento para los jugadores habituales, además de aumentar la explotación sexual y la prostitución y empeorar la seguridad pública. También creen que la actividad socavaría las acciones de lucha contra la corrupción, ya que, en su valoración, los juegos pueden convertirse en herramientas para el blanqueo de capitales, la evasión fiscal y la evasión de ingresos.
Angelo Coronel no cree en este escenario. Para él, la idea de que no habrá regulación en este mercado es errónea. También dice que la mejora de la legislación evitará la circulación de dinero proveniente de áreas delictivas, como el narcotráfico y el crimen organizado, algo que ya se investiga hoy, ya que la práctica no está legalizada.