El extécnico del Santos, Lisca, dijo en una entrevista que considera un «error» haber cambiado del Sport al Peixe en julio de este año. El entrenador dejó el club de Pernambuco después de apenas tres semanas de trabajo y se despidió de Ilha do Retiro en medio de abucheos y críticas de la directiva.
“Perdí una gran oportunidad de trabajar en el Sport. Hoy veo que fue un error. No me arrepiento, porque las cosas solo se saben hacer y andar, pero llegué a un gran club y no tenía las apoyo que tuve en el Sport», declaró a Canal do Luna.
Según el comandante, la conflictiva salida del equipo acabó por minar el inicio de su relación con el club de Vila Belmiro.
“El apoyo fue del presidente Rueda, y de los jugadores, la relación fue muy linda. Pero, como pasó todo, yo llegué al Santos ya desgastado. Como pasó, parece que Lisca hizo todo un lío.
La etapa de Lisca en el Peixe no duró mucho, y el técnico fue despedido «de común acuerdo» tras apenas ocho partidos (dos victorias, tres empates y tres derrotas). El entrenador incluso contó con el apoyo del presidente Andrés Rueda y del entonces director ejecutivo de fútbol, Newton Drummon, sin embargo, nunca hubo unanimidad entre la afición. Fue desconectado tras dos reveses consecutivos, ante el Gois y el Cear
“Cuando perdimos contra el Gois, el estadio también estaba en contra y realmente no tenía apoyo, con la situación que tuve en el Sport. Pero no pude volver, tuve que aceptar los errores. No me arrepiento. , pero fue un Es un error porque es difícil encontrar un ambiente como el que encontré en el Deporte. Quizás ese fue mi gran error”, concluyó.