En su mayoría, los clubes en el fútbol argentino no esperan ni son pacientes con los entrenadores, los resultados suelen mandar y a la primera de cambio, cuando las cosas no andan como deben, borrón y cuenta nueva, el técnico afuera y a buscar otro. Eso pasó con Frank Kudelka, que se fue de Lanús tras el empate 2-2 ante Godoy Cruz y arrastrando una mala racha de un solo triunfo en los últimos nueve partidos.
A lo que el club subió a Sebastián Salomón, que se encontraba desempeñando la función de coordinador de inferiores, a deté interino. Fue debut con derrota 2-1 ante Platense y a partir de eso, lo llamativo. Esta vez el resultado no mandó, los dirigentes bancaron al debutante técnico en Primera División pese al traspié inicial y lo confirmaron como oficial en el puesto. Un gesto que no abunda, para una persona querida por la institución (fue campeón del apertura 2007) y con un comunicado prometedor: «Jugadores, cuerpo técnico y dirigentes coincidieron en la importancia de respaldar la continuidad de este proceso, para cumplir con los objetivos dispuestos para esta campaña».
Al entrenador, ahora oficializado, se le viene recibir a Sarmiento el próximo lunes, visitar a Boca y el clásico ante Banfield. Un fixture complicado…