Natalia
Arroyo está de acuerdo con las declaraciones de Roberto
Olabe sobre el proyecto que viene. Según desveló el máximo responsable del club, 10 jugadoras han recibido una oferta de renovación y, a punto de finalizar la temporada, no han respondido con una afirmación. “Estamos en una situación de cambio de ciclo”, manifiesta al día siguiente la entrenadora de la Real. Pide “tranquilidad” y asegura estar “convencida de que la Real encontrará las herramientas para seguir mejorando”.
La recta final de la temporada irrumpe con la Real cuarta, la mejor clasificación de su historia. “Todavía hay opciones matemáticas para ir a Europa”, se agarra Arroyo, sabiendo que la dificultad es máxima. Si la Real pierde este domingo en el campo del Real Madrid, se quedará sin poder llegar a las tres primeras plazas. Para tratar de sumar los tres puntos en la visita del domingo (11.00 h.), la entrenadora tendrá que lidiar con las bajas por lesión de Nanclares, Iraia, Maddi
Torre, Bárbara
Latorre “y puede que alguna ausencia más”.
El Real Madrid-Real de Valdebebas es “un partido chulo” para Natalia Arroyo. La victoria de la primera vuelta en Zubieta (3-1) “nos posiciona en un buen punto de autoestima” y la catalana espera un duelo “abierto”, con “dos equipos que intentan ser atrevidos con balón”. Las txuri urdin se miden, a juicio de Arroyo, “contra una de las plantillas más potentes de la Liga”. Las aspiraciones de la Real pasan por “tener ventaja para tomar buenas decisiones” y por ser “solidarias sin balón” frente a un Real Madrid que es segundo en la clasificación.
