El nuevo socio directivo de Hasenhüttl, Sebastian Schindzielorz, destacó que todos en la organización comprenden la gravedad de la situación.
Para colmo de males, el VfL Wolfsburg acabó perdiendo contra el club que se rumoreaba que había destituido a su director deportivo el sábado. El director general del Sporting, Marcel Schäfer, dejó esta semana el equipo ecológico de Alemania en medio de rumores de que estaba en negociaciones con el RB Leipzig para ocupar el antiguo puesto administrativo de Max Eberl.
El hombre que Schäfter acaba de contratar literalmente para ayudar a los Wolves alemanes a evitar el descenso, el ex entrenador del Leipzig Ralph Hasenhüttl, ha perdido dos de sus tres partidos desde que tomó las riendas. El FSV Mainz 05, actual clasificado para el playoff de descenso y que hoy ha logrado una gran victoria, se encuentra ahora a dos puntos del Autostädter del norte.
El caos amenaza. Hasenhüttl y su nuevo colega de la directiva, Sebastian Schindzielorz, dejaron claro en su rueda de prensa posterior al partido del sábado que entendían la gravedad de la situación. El Wolfsburgo se enfrentará al Bochum la próxima semana. Una derrota ante el equipo que ocupa el puesto 15 de la Bundesliga, combinada con otra victoria del Mainz, podría llevar al VfL a terminar el próximo fin de semana en territorio de descenso.
«Pensé que hoy hicimos un partido valiente», comentó Hasenhüttl con aspecto demacrado en la rueda de prensa, «pero eso no es para mantenernos en la liga. El coraje por sí solo no es suficiente. Hay que tener calidad en el campo y ser «Podemos competir durante 90 minutos. No somos tan buenos en eso en este momento».
Cuando se le preguntó sobre sus rotaciones de personal (cinco cambios) y sustituciones que no produjeron nada, Hasenhüttl se mostró combativo. El austriaco admitió que «el plan no funcionó» antes de insistir en que había cogido sensibilidad con su equipo.
«Puedo garantizar que ahora sabemos en qué jugadores podemos confiar», dijo Hasenhüttl. «La próxima semana traeremos al campo al equipo que sea capaz de ganar este importante partido en casa contra el Bochum».
«La lucha por la supervivencia está ahí», añadió Schindzielorz, «es muy peligroso. Lo sabemos».