Gases y detonaciones por incidentes afuera del estadio en Godoy Cruz-Belgrano

De nuevo, la violencia. De nuevo, las imágenes que nadie quiere ver en una cancha de fútbol. Los sonidos que nadie quiere oír, el de las detonaciones y los llantos. El partido entre Godoy Cruz y Belgrano estuvo ocho minutos demorado -en dos intervalos- producto de los incidentes que se produjeron en las inmediaciones del Malvinas Argentinas entre la barra del club mendocino y la Policía.

Los enfrentamientos, que se produjeron cuando un grupo de barras intentaron entrar sin tickets al partido, tuvieron epicentro en el sector lindero con la popular que ocupaban los hinchas tombinos.

Sin embargo, esto no impidió que terminaran afectando a los espectadores que se encontraban dentro de la cancha: los efectivos policiales lanzaron gases lacrimógenos para disuadir a los barras, pero por efecto del viento el efecto irritante llegó a quienes observaban el partido desde la cabecera local.

Por indicación de los encargados del operativo, Leandro Rey Hilfer debió frenar por primera vez el encuentro cuando iban 30 minutos del primer tiempo. Y aunque 120 segundos después reinició las acciones, el encuentro debió volver a pararse para auxiliar a los hinchas que pedían pasar de la popular a la platea mostrándose notoriamente aquejados por los efectos de los gases. Muchos de ellos, padres y madres con niños pequeños.

“Que se vayan todos, que no quede ni uno solo”, fue el canto que tronó en el Malvinas de los hinchas genuinos hacia los barras que no se encontraban dentro del estadio, sino fuera de él, todavía enfrentándose a piedrazos con los efectivos policiales.