«El nombre clásico se queda corto porque era un partido bastante diferente entre Nacional y Millonarios, por todo. Millonarios tenía un gran equipo y Nacional tenía la base de la selección«, le dijo Carlos Estrada a el Carrusel. El jugador conocido como ‘La Gambeta’ fue campeón con los bogotanos en 1987 y 1988.
El nacido en Tumaco recordó como se vivía en algunos medios de comunicación: «Múnera Eastman hablaba de Pimentel como el número 4, no lo nombraba porque le tenía fastidio. Los goles de Millonarios que le hacía a Nacional él no los narraba de la misma forma. Fue una etapa muy linda, de nuestra vida, de nuestra carrera porque se veía la pasión por el fútbol, el amor que teníamos por la camiseta».
La rivalidad era tan grande que Estrada debía actuar: «a mí me tocaba separar a eso peleones, porque Pimentel peleaba con Leonel, Alexis peleaba con ‘Pájaro’ (Juárez). Los únicos que no peleábamos éramos Iguarán y yo porque estábamos en la selección y éramos amigos de los jugadores de Nacional».
Sobre los verdolagas recuerda ‘La Gambeta’: «Nacional jugaba demasiado fútbol, tenía jugadores muy buenos y un cuerpo técnico que yo siempre admiré, respeté y seguiré respetando porque no solamente cambiaron la connotación del fútbol colombiano a nivel internacional, sino que también conseguimos logros, como lo fue Pacho Maturana, ‘Bolillo’ Gómez y el profe Barragán. No ganábamos dinero, pero sí luchamos y sudábamos esa camiseta a morir».
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Estrada comparó lo que vivió él con lo de ahora: se ha perdido la verdad del fútbol, la realidad del fútbol. Es un espectáculo con responsabilidades, es un juego con responsabilidades. Por eso fue que fuimos diferentes y marcamos la diferencia».
Además, agregó: «nosotros entrábamos a divertirnos, a disfrutar, a acariciar el balón, a competir con el adversario. Más no a pelear, a tirarla pa’ arriba o a hacer lo que en estos momentos están haciendo. El fútbol se convirtió en un negocio, en una guerra de hinchas de algunos desadaptados y eso está acabando con el fútbol».
