Escandaloso final en La Paternal: la calentura de Vélez con el árbitro Echavarría

Furiosos. Así terminaron los jugadores de Vélez y algunos integrantes del cuerpo técnico del Gallego Méndez con el árbitro Pablo Echavarría, entendiendo que los perjudicó en el empate vs. Argentinos en La Paternal. Por tal motivo, apenas finalizado el encuentro, se le fueron al humo, protestando enfáticamente en pleno campo de juego. El árbitro debió ser rodeado por la policía y efectivos de seguridad. Hot. El Fortín aún no aseguró su presencia en Primera.

Aún arriba en el marcador, un ataque de Vélez apenas comenzado el ST derivó en la primera polémica en la tarde del sábado de La Paternal. ¿Debió Echavarría haber cobrado penal para el equipo del Gallego Méndez? Acá la repasamos.

¿Qué pasó? Roberto García escaló por la derecha y tiró un centro a la carrera. Deseperado, Mariano Bíttolo saltó en el borde del área grande para tratar de impedir la llegada del balón al corazón del área y terminó extendiendo su brazo. La pelota dio en la mano del jugador del Bicho y Echavarría decidió cobrar tiro libre.

¿Era penal? La jugada es realmente muy fina, típica de VAR. Díficil de ver si el brazo (en el aire) de Bíttolo estaba sobre la línea o fuera. Con la cámara al ras del campo de juego, ubicada desde el arco de Vélez, daría la impresión de un contacto brazo/mano con el esférico sobre la línea del área.

Desde el VAR (a cargo de Nazareno Arasa) analizaron la acción pero le terminaron dando la derecha a Echavarría. Para colmo, a menos de 15 minutos para la conclusión, Argentinos lo terminó empatando.

A los 48′, Gianluca Prestianni quedó mano a mano con Javier Cabrera. El del Bicho se tiró al suelo para impedir que el chico de Vélez progresara en el ingreso al área grande y, en ese afán, la pelota tocó su brazo izquierdo. Desaforados, Méndez y compañía reclamaron con énfasis. «Es mano, pero posición natural», se pudo leer en los labios del árbitro como respuesta. Desde el VAR compartieron la decisión inicial del pito principal y no hubo penal. Cierta similitud a la del brasileño Guga con Fabra en la final de Libertadores de Boca vs. Fluminense.

«No hablé nada con el árbitro. Fui a sacar a mis jugadores porque todavía tenemos un partido más. No más que eso. Sabíamos que algunos muchachos llegaban con lo justo y se iban a terminar cansando. En base a eso fuimos modificando. Cuando nos estaba costando llegar, intentamos poblar más el medio para tener más marca. Ellos hicieron todos cambios ofensivos, a nosotros nos estaba costando. Y después termina así el partido. Cada uno sacará sus conclusiones. Perdón, no tengo muchas más ganas de hablar. Perdónenme, que tengan buenas tardes. Nos vemos», fue todo lo que dijo el Gallego Méndez en conferencia. Un Gallego evidentemente golpeado y molesto.