Colombia vive instantes de máxima intensidad por la clasificación del combinado tricolor a la final de la Copa América, luego de 23 años de espera, en búsqueda de su segundo trofeo continental, luego del logrado en 2001 de la mano del chocoano Francisco Maturana. Y el protagonista de esta ilusión es, justamente un argentino: Néstor Lorenzo.
La campaña hecha por Néstor ha revolucionado las calles de Villa Celina, su barrio natal de la capital Buenos Aires. Este barrio argentino disfruta con emoción el día previo al crucial enfrentamiento contra la Albiceleste, actual campeona del mundo y que además busca su segundo torneo consecutivo, pues también es lavigente reina de América.
Los vecinos, según pudo constatar el diario Olé, que visitó la zona, están divididos: unos, entre el deseo de ver triunfar a su selección y otros, por el cariño por el técnico que creció entre ellos y hoy tiene soñando a más de 50 millones de personas con alcanzar la gloria, precedida de laracha de 28 partidos sin conocer la derrota y la magia de su capitán, James Rodríguez.
Pese a la pasión que genera este inédito duelo, Luisa, madre de Lorenzo, continúa su rutina diaria. Cada mañana, abrigada, recorre las calles de Celina junto a Alberto, el hermano de Néstor y mientras recorren las calles han recibido comentarios alegres de los vecinos, emocionados por el logro del equipo cafetero en la competencia.
El barrio en el que nació Néstor Lorenzo, emocionado con Colombia
«Vamos Colombia», «Qué felicidad, Luisa» y «Grande Néstor» son algunos de los saludos que acompañan su camino hasta el club Riachuelo, donde Néstor dio sus primeros pasos en el fútbol, antes de llegar a la selección Argentina como jugador, cuando integró el plantel que disputó la Copa del Mundo de 1990.
Alberto, hermano del DT, está tranquilo y confiado en el desempeño de Néstor. «Mi hermano va a hacer que Colombia juegue a ganar. Va a intentar ser protagonista y jugarle de igual a igual a Argentina», dijo. Luisa, en tanto, aunque orgullosa, admitió finalmente su nerviosismo, por lo que toma pastillas para dormir debido a la ansiedad del partido.
«Toda mi familia, amigos y vecinos quieren lo mejor para Néstor. Argentina ya ganó el campeonato mundial, ahora le toca a Colombia»
Dijo el hermano del estratega.
En la zona, cabe destacar, está ubicado el Club Riachuelo, que es un emblema del barrio y tiene un significado especial para Lorenzo y su familia. Jorge y Pablo, que son los encargados de esta modesta institución recordaron con cariño para el citado medio las visitas del entrenador.
«Hace tres meses estuvimos comiendo un asado con Néstor en el club. Charlamos sobre la Copa América y nos contó que estaba muy entusiasmado con el equipo», mencionaron ambos.
Por otro lado, el afecto de los vecinos hacia Néstor también se reflejó en el comercio Marano Televisión, otro punto de concurrencia en Ciudad Celina. Don Leonardo Marano, dueño del negocio desde 1938, expresó su cariño por Lorenzo y trajo a colación cómo, en diciembre del año pasado, el estratega visitó su tienda para disfrutar de churros caseros.
«Cuando vino Néstor lloré como un desgraciado. Nadie me podía parar. Cada vez que viene me abraza y es muy cariñoso conmigo», relató emocionado Leonardo.
El orgullo de Celina, a punto de ser campeón de América
Pese a los sentimientos encontrados que genera esta instancia, hay un fuerte apoyo hacia Lorenzo en Celina. «Uno sufre por el cruce entre Colombia y Argentina. Néstor es un muchacho muy querido acá en el barrio. Argentina ya ganó el campeonato mundial, ahora queremos ver triunfar a Néstor», agregó Leonardo, que es el dilema emocional de los vecinos.
La clasificación de Colombia a la disputa del título, justamente bajo la dirección de un hijo del barrio, puso en primer plano el sentido de comunidad y orgullo local. La mamá del timonel está convencida de que su hijo ha tomado las decisiones correctas para llevar al equipo a la final.
«Después de ganarle a Uruguay, Néstor me llamó muy emocionado. Todas las noches hablamos y lo aconsejo para los partidos. Es más, esta noche antes de la final seguramente lo llame también», confesó.
La decisión de la familia Lorenzo de quedarse en casa para ver la final, en lugar de viajar a Estados Unidos, es muestra de la importancia de las raíces y la cercanía con el barrio. «El más querido de los vecinos. El que fiaba y al que todos le compramos la primera TV a color», dijo el propio entrenador en una dedicatoria en Instagram, tras visitar a Leonardo Marano.
Este domingo, los corazones de Villa Celina latirán al ritmo del partido que decidirá si Colombia consigue su sueño americano. Mientras tanto, la comunidad sigue apoyando a su ilustre vecino, que, con esfuerzo y dedicación, ha llevado a Colombia a la puerta de la gloria.
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