El pase se concretó a comienzos de 2022, pero recién ahora estalló la polémica. Casi un año y medio después de haber pasado a River, Andrés Herrera acusó a los dirigentes de San Lorenzo por extorsión e inició una demanda laboral reclamando más de 400 mil dólares por haberlo presuntamente presionado con resignar el 15% de la ficha que pertenecía al futbolista.
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El correntino pasó al Millo a cambio de poco más de 3 millones de dólares bruto por el 70% de su ficha en el inicio de la temporada pasada. A poco para el comienzo del torneo y ante la falta de jugadores de jerarquía en esa posición, Agustín Giay empezó a asomar como una alternativa. Y en una práctica habitual entre los futbolistas y los clubes que los forman, el Yacaré resignó la parte que le corresponde por ley para cedérsela a la institución como gesto de agradecimiento.
Ante la consulta de Olé, desde el club indicaron que el Yacaré selló de manera voluntaria la donación del porcentaje en un documento firmado por el propio lateral derecho y Gustavo Lescovich, su representante. “Es voluntad del jugador resignar y donar el cobro mencionado en el punto precedente para que CASLA lo destine a la promoción del fútbol juvenil de dicha institución”, indica el texto en cuestión.
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Desde el Ciclón están convencidos de su postura y tienen varios argumentos a su favor. “El claro ejemplo de que Herrera entregó el cheque del 15% voluntariamente es que lo hizo después de que estuviera firmado su pase a River. Por lo tanto, si no daba el cheque, igual la transferencia ya estaba hecha”, sostuvieron desde la mesa chica dirigencial.
Y agregaron: “El jugador donó el 15% en agradecimiento a San Lorenzo por todo lo que lo ayudó en su formación profesional y, en pos, de obtener el crecimiento en su carrera que él imaginaba que le significaría el pase a River”.