Cuando se supo a principios de verano que Kylian Mbappé le había informado al Paris Saint-Germain que no extendería su contrato más allá de 2024, el futuro del capitán de Francia se convirtió inevitablemente en la historia central de la transferencia en el fútbol francés una vez más.
El acuerdo que el delantero firmó en 2022, que solo canceló temporalmente el interés del Real Madrid, se anunció inicialmente como un contrato de tres años. Sin embargo, en realidad, el último año es parte de una cláusula que Mbappé necesitaría activar él mismo.
En julio de 2022 le dijo al club que no sería así. En declaraciones públicas, simplemente indicó que tiene la intención de jugar para el PSG la próxima temporada, y se mantuvo ambiguo sobre sus intenciones más allá de eso. A raíz del último giro en la interminable saga de transferencias de Mbappé, los campeones de la Ligue 1 preferirían vender al jugador de 24 años este verano que dejarlo irse gratis el próximo junio.
De acuerdo a L’Équipe esta tarde se han reanudado las discusiones informales entre el campo de Mbappé y el PSG, aunque persisten desacuerdos considerables. El club cree que el ganador de la Copa del Mundo quiere impulsar una transferencia gratuita para obtener una tarifa de firma más alta en su próximo club.
Aunque Mbappé no estaba satisfecho con el negocio de transferencias del club el verano pasado, estos últimos también están desconcertados de por qué su carta se envió mucho antes del final de la ventana de 2022, agrega L’Équipe.
La perspectiva de que el delantero se vaya en una transferencia gratuita también pondría en peligro el proyecto a largo plazo del club, dado que la posible tarifa de transferencia que habría traído su futura transferencia se tuvo en cuenta con respecto a los cálculos de FFP.
Su partida obligaría al club a vender más jugadores, en un momento en que necesitarían reemplazar a su jugador estrella. Si bien, según los informes, Mbappé cree que el club debería construir un equipo que no necesite depender de él, el PSG señala el hecho de que su lucrativo contrato significa que sería difícil operar de otra manera.
Mientras tanto, el PSG ha fijado el 31 de julio como fecha límite para que Mbappé ejerza la opción de su contrato; si nada cambia para entonces, intentarán venderlo este verano. Paradójicamente, el PSG podría presionar para dejar ir a Mbappé cuando el delantero quiera quedarse la próxima temporada, pero también quiere irse al final de la misma.
GFFN | Rafael Jucobin