El equipo, de corrido, puesto en cancha, es un 11 top. Un 11 que sería la envidia de cualquier club. Un 11 que, por qué no, puede aspirar a ganar la Séptima. Sin embargo, no es que lo que Russo pondrá en La Paz para el debut en la Copa Libertadores 2021, sino justamente lo contrario: lo que Boca no tiene, lo que no dispone, las figuras que son bajas.
Si se armara una formación con todos ellos, Boca jugaría con: Andrada; Zambrano, Rojo, Fabra; Salvio, Campuzano, Pulpo González, Cardona; Pavón, Tevez y Zárate. Sí, un verdadero equipazo, con ausencias que tienen diferentes razones y que obliga a Miguel a moldear otra estructura con lo que a mano para enfrentar este miércoles tiene a The Strongest.
Fabra, Campuzano y Cardona, tres bajas claves para el DT. (Prensa Boca)
La primera lectura es si, con este 11 que el DT hoy no cuenta, se puede decir que Boca tiene un plantel corto. El enunciado, claro, enseguida debería un primer cuestionamiento: ¿qué les queda a los demás? Sin embargo, la forma en la que el Xeneize arrancará el máximo objetivo, esa Copa que persigue desde que ganó la última, en 2007, refleja que hoy está diezmado, debilitado.
Las bajas actuales
La realidad es que para este estreno, el DT se quedó sin piezas claves. La última fue su arquero titular, Esteban Andrada. A Sabandija, incluso, lo había guardado contra Atlético para llevarlo fresco a la altura. Pero al final, debió excluirlo por ser contacto estrecho de un caso sospechoso de Covid. Su hisopado dio negativo, pero Boca aplicó el protocolo correspondiente para estas situaciones y lo bajó del avión.
Después, por contagio directo, el DT ya sabía que iba a tener las ausencias de Campuzano y Zambrano, pero el domingo, luego de otro testeo, se le sumaron otros dos hombres fundamentales: Cardona, a quien también Miguel había guardado para The Strongest, y Rojo, que además venía con una molestia muscular.
El único jugador que el DT ya sabía que no iba a tener a disposición era Fabra desde hace tiempo era Fabra. No sólo no estará en el estreno en La paz, sino tampoco contará con él en los próximos dos juegos coperos: Santos de local y Barcelona en Guayaquil, ya que debe cumplir tres fechas de suspensión por su roja en la semifinal pasada.
Carlitos se entrenó este miércoles en Ezeiza. Le apunta a Huracán (Prensa Boca).
El que Miguel sí decidió apartar del viaje por su propia cuenta fue Carlos Tevez. En ese sentido, el entrenador no quiso exponer al capitán y sus 37 años a los efectos de la altura (no sólo al juego en esas condiciones sino a las consecuencias de la vuelta). Por eso, lo dejó en el predio de Ezeiza, donde se entrenó este miércoles pensando en el choque del sábado con Huracán, por la Liga.
Después, en un lunes que no tuvo buenas noticias para el entrenador, también se conoció la baja de Mauro Zárate. El delantero ya estaba descartado por la lesión que sufrió contra Atlético, pero además se confirmó que el DT tampoco lo tendrá para los próximos partidos de Copa: tiene un desgarro en el gemelo izquierdo.
Las ausencias de arrastre
A estos nombres de peso, hay que agregarles otros de trascendencia, que ya estaban afuera, pero que seguramente hoy recibieron gran aporte para el entrenador. Y son tres más, para completar ese equipo top.
El Toto se está recuperando en el predio.
El más importante es el Toto Salvio, clave en la estructura del Boca bicampeón, que difícilmente pueda disputar esta Libertadores. En marzo fue operado de la rotura del ligamento cruzado anterior de la rodilla izquierda y recién podría volver en noviembre, justo para cuando esté previsto la final. Si la difícil tiene es porque habrá que ver en qué condiciones llega a ese momento y porque también depende de que el equipo se clasifique a esa definición
Después, hay dos hombres que Russo sí podrá disponer en poco tiempo. Uno de ellos es el Pulpo González, ya recuperado de una operación en el tobillo izquierdo. El volante viene haciendo una mini pretemporada para ponerse a punto en lo físico y en cualquier momento estará a la orden para volver.
El otro es Cristian Pavón, quien también viene buscando su mejor forma tras ser intervenido de sus dos tobillos. Después de tantas idas y vueltas, todo parece indicar que Kichán se quedará en el club a cumplir su contrato (vence en junio del 2022). De hecho, Boca lo incluyó en la lista de la Copa, con el número 31. Así, será un refuerzo que Russo podrá utilizar en los próximos partidos de la Libertadores.