Los gestos de Gallardo hablaron por sí solos. Varios de los titulares que jugaron en el Bosque, en ese mix que MG armó pensando en la Libertadores, no superaron la calificación mínima requerida. El empate fue la coraza de algo mucho más profundo: River tuvo varios puntos bajos. Rendimientos individuales que dejaron mucho que desear y sobre los que el Muñeco deberá trabajar pensando en lo que sigue.
foto MARCELO CARROLL – FTP CLARIN DSC_0350.jpg Z
No es solo la estadística: también es el concepto. Manu Lanzini, titular después de tres partidos en el mix que armó Gallardo en el Bosque, desaprovechó una nueva oportunidad para mostrar que lo que había insinuado en los minutos que jugó frente a Talleres en Córdoba por la Libertadores lo podía continuar en el torneo.
Gallardo enseguida notó el pobre partido del volante que se había parado a la izquierda de Peña para desde ahí intentar juntarse con nacho por el medio, al punto que lo sacó en el entretiempo para darle lugar a un Maxi Meza, que para colmo ilusionó al entrenador y a los hinchas con sus pinceladas de calidad casi en la misma proporción que Manu los decepcionó.
Aunque con lo visto en cancha fue suficiente, al detenerse en las estadísticas de los 45 minutos en cancha del ex West Ham la preocupación se hace mayor. Porque los números indican que el volante tuvo 0 quites, 0 gambetas, 0 duelos ganados, 0 chances creadas, 0 infracciones recibidas y 13 pelotas perdidas.
Aunque lo peor para River es que no fue el único que desaprobó un examen que al Muñeco le sirve para, como subrayo, terminar de definir el plantel: Pablo Solari una vez más hizo gala de una inquietante crisis de confianza que en La Plata lo hizo pasar inadvertido, Milton Casco no mostró indicios de un crecimiento en su nivel sino todo lo contrario, Leandro González Pirez hizo que el contraste con el recién llegada Germán Pezzella se hiciera demasiado evidente, Ignacio Fernández solo pudo festejar el gol dentro de un rendimiento que lo sigue alejando de la titularidad en los partidos que valen, Funes Mori certificó que sólo estuvo en cancha porque al entrenador no lo convencen ni Federico Gattoni ni Franco Carboni y Adam Bareiro otra vez no encajó en el equipo: fue el jugador con más pelotas perdidas (20) hasta que salió del campo de juego.
El resumen del partido vs. Gimnasia
River Plate –