La Real femenina despidió ayer la temporada en Zubieta ante el Barcelona con sensaciones agridulces. No tanto por perder ante el campeón, algo que cabía presupuestar, como por ceder la cuarta posición en la clasificación que tendrá muy difícil recuperar en la última jornada en Valencia. El último partido de las txuri urdin en casa, además, estuvo marcado por el elevado número de incógnitas existentes en torno al futuro de la mitad de la plantilla que esta temporada ha entrenado Natalia
Arroyo que continúan sin resolverse.
Nahikari
García, una de las futbolistas que no continuará ya que tiene decidido fichar por el Real
Madrid, se expresó en términos enigmáticos y sentimentales en las redes sociales. Por un lado público en su perfil de Instagram una imagen de su camiseta, con el ‘7’ a la espalda, en la que serigrafió el mensaje ‘azkena etxean’, del que se puede desprender que se despedía de la Real. Tras el partido también publicó una foto de todo el equipo bajo el título ‘familia txuri urdina’. Lucía
Rodríguez también lanzó el siguiente mensaje con claro aroma a despedida en su cuenta de Twitter: “Eskerrik asko Zubieta. Beti”, acompañado de un doble corazón txuri urdin.
La familia a la que alude la capitana, de forma innegable, no va a continuar unida la próxima temporada. Nahikari y Lucía harán las maletas rumbo a la capital de España ya que, como MD informó en su día, el Real
Madrid ya contactó con el club txuri urdin para comunicarle su interés en ambas jugadoras. Es muy difícil, asimismo, que sigan jugadoras con caché como Maitane
López
Millán o incluso Leire
Baños, con ofertas. Por su descenso de protagonismo esta temporada, lo lógico es que la Real no cuente con Manu
Lareo y Kiana
Palacios regresará a México. Latorre, Torre, Mendoza, Itxaso y Mariasun son las otras cinco jugadoras que terminan contrato. A la primera, internacional, no le faltarán propuestas y si la de la Real no le convence es fácil que la rechace. Maddi es, junto a Iraia y Etxezarreta, la jugadora de campo que menos ha jugado y está en una situación difícil desde la polémica en la que se vio envuelta a raíz de la huelga. Y las tres últimas, núcleo duro del equipo las últimas temporadas, pueden entrar dentro de ese relevo generacional al que ha aludido la Real de cara a la próxima campaña No tanto por edad -Uriarte es la más veterana camino de los 30 años- como porque llevan muchos años en el club.