La verdad, lo de Defensa y Justicia ya era para llamar a una bruja, hacer una limpieza o invocar a los espíritus de aquellos equipos campeones de los que disfrutó hace no tanto tiempo. Es que el Halcón arrastraba una racha de 15 partidos sin ganar y para encontrar el último triunfo había que remontarse hasta abril, cuando superó por la mínima a Newell’s en Florencio Varela. Es más, había alcanzado la peor racha, que se registró en la temporada 87/88. Hasta este lunes que se cortó la mala…
Es que frente a un Banfield que también viene golpeado (ganó uno de los últimos ocho encuentros que disputó) desde el arranque hizo todo para reencontrarse con la victoria pero tuvo que esperar hasta el segundo tiempo para poder ponerse arriba.
Ya en la primera mitad el equipo de Francisco Meneghini había demostrado una idea clara, bien desarrollada y, como consecuencia, había tenido las chances de gol más claras. Pero no conseguía romper el cero. A pesar de que los primeros minutos fueron dinámicos aunque con pocas situaciones, un movimiento de pizarrón hizo la diferencia.
Es que cuando Alanís se retrasó y buscó jugar entre líneas, Defensa encontró espacios y Osorio los pudo aprovechar en varias ocasiones. Además, como para sumarle otro camino hacia el arco de Sanguinetti, Alexis Soto (ex Taladro) ejecutó dos tiros libres desde el borde del área que pasaron muy pero muy cerquita.
Defensa y Justicia –
El gol de Sosa para la victoria del Halcón
Pero los de Varela venían tan torcidos que los merecimientos no alcanzaban para andar confiándose. Entonces, recién respiraron en el arranque del complemento, cuando apareció otra vez Alanís, que metió un gran centro, y Matías Sosa empujó la bocha al gol.
La visita lo fue a buscar, nadie podrá decir lo contrario. Munúa metió todos los jugadores de ataque que tenía en el banco y más allá de algunos buenos ingresos, como el de Matías González, que hizo un jugadón y obligó a una gran tapada de Beto Bologna (un ídolo histórico de Banfield), le faltó claridad y lo pagó con la derrota.
