Hace unos días, Rodolfo De Paoli dejó de ser el entrenador de Independiente Rivadavia, club que este mismo jueves anunció oficialmente a Martín Cicotello como el nuevo director técnico del plantel profesional. Luego de su salida de la institución, el reciente ex entrenador de la Lepra mendocina se expresó sobre su desvinculación y reflexionó sobre su paso por el elenco mendocino.
«Acabamos de rescindir el contrato hace media hora. Salimos recién de Independiente en muy buenos términos, y claro que han pasado cosas que van a quedarme para siempre. Algún día cuando sea un abuelo y cuente mi historia en el fútbol contaré, para mi manera de ver, cómo es el fútbol. Hoy si cuento cómo es el fútbol, quedo afuera del fútbol. Me trago muchos sapos. Lo único que puedo decir es que estoy orgulloso de este plantel, que ojalá hoy gane el partido que tenga que jugar, le deseo una gran temporada al nuevo entrenador. Ojalá le vaya muy bien, tiene muchas condiciones», expresó De Paoli, en diálogo con el programa F12 de ESPN.
En esa misma línea, quien también es periodista y relator marcó las dificultades que existen a la hora de querer trabajar como entrenador sin contar con un representante: «Es muy difícil (ser DT) sin representante, y no pasaron cosas con los futbolistas, al contrario, la mejor. Me han representado (los futbolistas) y seguramente con algunos de ellos me vaya a comer estos días antes de viajar a Buenos Aires y estoy muy contento de la manera en que lo hicieron».
De Paoli es el sexto técnico de Primera que deja su cargo en siete fechas de la Copa de la Liga. En ese sentido, destacó que, en ese contexto y desde el rol de entrenador, es difícil mantenerse si no se consiguen buenos resultados en las primeras fechas: «Acá, en definitiva, cuando nosotros hicimos a mi gusto un gran partido ante Rosario Central, yo felicité a los jugadores con una euforia quizá que a muchos no les gustó, porque felicité a un equipo que perdió. Pero nosotros acabamos de ascender a Primera División, arrancamos el 8 de enero, y entre el 8 de enero y el 18 de febrero llegaron todos los jugadores, y por suerte hasta hoy no se lesionó ningún jugador de manera muscular. Incorporamos más de 20. Entonces me parece que hicimos una gran pretemporada y logramos sobre siete partidos, seis puntos. Y más allá del rendimiento, que por momentos fue muy bueno, yo te firmaba los seis empates y una derrota. Te los firmaba con los ojos cerrados».
«No competíamos de igual a igual a nivel estructura. Platense el año pasado jugó la final de la Copa de la Liga, pero Platense hace tres años que está en Primera. Vendió un jugador al Milan por más de tres millones de dólares. Y pasó por un proceso. Nosotros no pasamos por ningún proceso. Estamos iniciando por un proceso nuevo, donde estamos buscando lugares para entrenar, materiales para entrenar y por eso valoro tanto lo de estos jugadores y le agradezco a los jugadores que han llegado de que confiaran en mi proyecto. Lamentablemente esto es fútbol. Ponele que fueran resultados, no hay ningún problema, lo sabemos, y no se termina el fútbol, seguramente en breve habrá alguna oportunidad nueva de seguir trabajando y más que nunca quiero trabajar porque estoy convencido que es por ahí la cosa», agregó.
Cómo lo ven desde adentro por su figura de relator
Consultado por la mirada que pueden tener dentro del mundo del fútbol sobre él por su figura de relator, De Paoli explicó que él es director técnico gracias a la conexión que siempre logró con sus dirigidos: «Por los jugadores es por lo que yo soy entrenador de Primera División. Arranqué en Primera D hace muchísimos años, con 27 años en Deportivo Riestra, dirigí la D, dirigí la C, dirigí el Nacional B… Tuve la suerte de lograr un título, de haber jugado un partido internacional como fue con Patronato en la Copa Libertadores, la Copa Sudamericana, volver a competir en Primera División con un equipo recién ascendido como es el caso saliente de Independiente Rivadavia, y hasta hoy sin representante».
«La realidad es que si logré esto que te acabo de decir siendo el relator que soy es porque justamente los jugadores me han puesto acá. Son los que en el boca a boca me han ayudado y les agradezco a todos. Algunos les puede gustar más o menos, pero son los que te terminan poniendo en los lugares», señaló.
«Yo creo que es mi punto más fuerte (la conexión con los jugadores). Y te lo dicen ellos. La realidad es que después por ahí los que te conocen poco pueden llegar a generar alguna duda, porque no hay mucho tiempo para vincularse, pero que ayer yo haya recibido más de 15 mensajes de los futbolistas de manera genuina… La realidad es esa. Después puedo tener un método, puedo errarle a un planteo, puedo equivocarme en un cambio, puedo ser demasiado expresivo, pero yo creo que lo que valoran ellos es lo que yo no tuve como futbolista», agregó.
«El jugador se da cuenta que yo también fui futbolista. Y ese es el punto del que uno como entrenador no se tiene que olvidar nunca, que en algún momento fuimos futbolistas, y darles un beso y un abrazo cada mañana es algo genuino, no es vender humo. Lo que quizás no me dieron a mí como futbolista yo se lo trato de dar a ellos como entrenador», completó De Paoli.