Una de las llegadas que llamaron la atención en su día en la Juventus de Turín fue la de Dani Alves. El brasileño abandonó el Barcelona tras un conflicto con la directiva culé y desembarcó en la Juventus de Turín. Allí, con Massimiliano Allegri como entrenador en 2017, jugó con aquel sistema llamativo en su momento, y no por su forma (3-5-2), sino por sus funciones. En un fútbol que cada vez era más ofensivo, aparecía la ‘BBC’ defensiva y un sistema más centrado en ese aspecto para plantarse en una final de Champions en la que sería arrollado por una gran segunda mitad del Real Madrid.
Y precisamente al hilo de esto se marchó Dani Alves. El futbolista brasileño ha confirmado el por qué decidió marcharse de la Juventus: «Me prometido que iban a cambiar su estilo de juego». Pero esa promesa no llegó, y se fue. El club siguió confiando en lo que hacía un Massimiliano Allegri que plantó al equipo en otra final europea y le sustituyó posteriormente con un Joao Cancelo que dejó un nivel altísimo en una sola temporada en Turín, tanto que invirtió mucho en él el Manchester City.