El penal de Debinha en el primer tiempo le dio a Brasil su cuarto título consecutivo de la Copa América Femenina al vencer a la anfitriona Colombia 1-0 en Bucaramanga.
La delantera se levantó luego de ser derribada por la defensora Manuela Vanegas para desviar desde el punto penal a la arquera Catalina Pérez.
Pia Sundhage es la primera entrenadora en levantar el trofeo, Brasil ganó por octava vez en nueve torneos.
Su equipo anotó 20 goles en seis partidos, sin conceder ninguno, en el camino hacia el título.
Los ganadores recibieron 1,5 millones de dólares (1,23 millones de libras esterlinas) en premios en metálico, mientras que los finalistas recibieron 500.000 dólares (410.000 libras esterlinas).
Al terminar entre los tres primeros, ambos equipos se clasificaron para la Copa del Mundo de 2023 y, al llegar a la final, aseguraron su lugar en los Juegos Olímpicos de París del año siguiente.
