El presidente de la CBF, Ednaldo Rodrigues, se reunió con el ministro de Justicia, Flvio Dino, el pasado sábado, horas antes del fallo de la Supercopa de Brasil, en Brasilia.
En el encuentro, el ministro y el presidente de la entidad discutieron políticas para combatir el racismo y la violencia en el fútbol. Desde que asumió el cargo, en marzo de 2022, Rodrigues viene subrayando que la lucha contra la discriminación en el fútbol es una de las prioridades de su gestión. Ednaldo es el primer presidente negro y nordestino en la historia de la CBF.
“La lucha contra el racismo es una de mis principales banderas en CBF. La discriminación racial es un delito y nuestro trabajo es arrojar luz sobre el tema. Contar con el apoyo del Ministerio de Justicia nos hace más fuertes para demostrar que ya no hay lugar para racistas en el fútbol», dijo Ednaldo Rodrigues.
Durante el encuentro, el Ministro de Justicia y el Presidente de la CBF también discutieron cambios en la ley que tornaron más rígidos los castigos en la lucha contra el racismo en el fútbol brasileño. El presidente Lula sancionó la ley que equipara el delito de injuria racial al racismo, que es imprescriptible e imprescriptible. El texto también prevé un aumento de las penas por delitos cometidos en eventos deportivos y culturales del país.
“La nueva ley promulgada es un gran avance en la lucha por un deporte y una sociedad más justos, más humanos y más fraternos. La nueva ley envía un mensaje claro a los racistas”, dijo el presidente de la CBF.
Con el cambio, la injuria racial puede acarrear penas de prisión de dos a cinco años. Anteriormente, la pena era de uno a tres años. Otra modificación es que, si el delito es cometido por dos o más personas, la pena se duplicará.