Fue una noche de jugadas polémicas. Como si no hubiese sido suficiente con el clima caliente que había en el estadio por el flojo arranque de Independiente en la Liga, el partido entre el Rojo y Vélez tuvo jugadas pusieron el foco en el arbitraje de Darío Herrera. Se trató de dos acciones que podrían haber cambiado el curso del partido.
El juez comenzó bien, con un gran acierto. A los 28 minutos de la primera etapa tomó una decisión correcta al sancionar penal para Vélez por una infracción que Damián Pérez cometió sobre Braian Romero. Luego de una pérdida de pelota de Lautaro Millán, el lateral izquierdo de Independiente fue con todo desde atrás para tratar de frenar al delantero y se lo llevó puesto en el área cuando el futbolista del Fortín se perfilaba para definir ante la salida de Rodrigo Rey. Herrera no dudó y sancionó penal, aunque no amonestó al marcador de punta del Rojo por la infracción. Claudio Aquino no falló desde los 12 pasos y selló el 1-0 parcial para el visitante.
Vélez –
Aquino abrió la cuenta de penal para Vélez
Las acciones más polémicas del encuentro llegaron en el segundo tiempo. Iban 22 minutos del complemento cuando Francisco Pizzini cabeceó tras un centro frontal de Agustín Bouzat y le bajó la pelota a Damián Fernández, quien metió lo que hubiese sido el 2-1. Sin embargo, el juez de línea Maximiliano Castelli levantó la bandera y la jugada fue revisada en el VAR, que estuvo a cargo de Héctor Paletta. Tras trazar las líneas, se sancionó un offside milimétrico de Pizzini en el momento en el que partió la pelota en el centro de Bouzat.
Vélez –
Vélez anotó el segundo pero se lo anularon
El penal que pidió toda la cancha
Un rato más tarde, a los 39 minutos, el ingresado Alexis Canelo le puso un buen pase en profundidad a Santiago López, quien encaró a un Elías Gómez que llegó a destiempos a cruzarlo y lo bajó. La sensación inmediata fue que lo desestabilizó y que era penal, pero el árbitro consideró que primero tocó la pelota y dejó seguir. “No sé si fue penal, lo tengo que ver. Pero primero toca la pelota y después me toca a mí, creo que no”, dijo López. Más allá de sus palabras, el juvenil no se tiró, sino que fue derribado por el toque.
Club Atlético Independiente –