había mucha preocupación. Y ayer llegó una noticia que trajo algo de alivio. Facundo Altamirano no tendría que pasar por el quirófano. El arquero de San Lorenzo no pudo completar el partido del domingo pasado ante Racing (1-4), como consecuencia de un golpazo que recibió en el ojo en una situación de gol de la Academia.
Altamirano chocó con el codo de su compañero Gastón Hernández y el impacto tuvo un precio muy alto para él: terminó con la órbita ocular inflamada. El parte médico oficial que publicó el club indicó que padeció una fractura en el malar y hasta el sábado tenía muy hinchada la zona del traumatismo, lo que les impedía a los médicos realizar un análisis más exhaustivo con el fin de establecer un plazo aproximado para su recuperación. Si bien todo parecía indicar que iban a tener que dejar pasar una semana para que se le desinflame la órbita del ojo, los médicos observaron al arquero de 27 años ayer y le dieron una muy buena noticia.
A Altamirano le realizaron un estudio oftalmológico y los resultados le salieron muy bien, ya que se constató que no padeció ninguna lesión ocular. De esta forma, se despejó una gran preocupación que estaba latente desde el viernes. Todo indica que el ex Banfield, Estudiantes de Caseros y Patronato se salvará de tener que pasar por el quirófano, por lo que tardará menos tiempo en volver a las canchas.
Cuándo podría volver
Por lo pronto, no estará a disposición para el encuentro del martes ante Estudiantes, en el Nuevo Gasómetro. El miércoles será analizado por el especialista maxilofacial y definirán si hay chances de que esté el sábado ante Tigre, aunque apuntan a que pueda reaparecer el sábado 24 contra Huracán en el Tomás Ducó, con una máscara de protección.