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Emerson ha sido uno de los jugadores destacados en La Liga esta temporada según Marca, pieza fundamental del lateral derecho del Real Betis. Ha proporcionado tres asistencias y un gol en sus últimos cinco partidos. Emerson se incorporó al Betis hace dos años y ya ha jugado 67 partidos con el club, y ahora está adaptado al fútbol español.
Esa era la ambición del Barcelona cuando lo fichó en enero de 2019 junto al Betis, del Atlético Mineiro. Costó 12 millones de euros en total, y ambos clubes pagaron 6 millones de euros cada uno. Su acuerdo indicaba que Emerson jugaría en el Betis hasta junio de 2021 y luego el Barcelona lo llevaría a Cataluña pagando los 6 millones de euros que pagó el Betis más una tarifa adicional de 3 millones de euros más.
Barcelona estaba en una situación económica muy diferente en 2019 a la que está ahora, y también ha habido un cambio significativo en las oficinas del Camp Nou. Pep Segura, el hombre que sancionó el trato, se ha ido, y se espera que Mateu Alemany sea el hombre que tome su puesto. Tendrá que discutir con las potencias relevantes qué hacer con el brasileño.
El Barcelona no puede vender a Emerson hasta el verano de 2022, momento en el que la tarifa se dividiría 50/50 entre ellos y el Betis. Dentro de este acuerdo, también existe la posibilidad de que el Betis se haga cargo de sus derechos económicos por completo, si el Barcelona no activa su opción. Entonces los roles se invertirían. Desde el punto de vista deportivo, esto sería una obviedad para el Betis, pero su realidad económica también es algo complicada.
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