El exfutbolista argentino Ariel Ortega, conocido por sus regates y filigranas, sobre todo vistiendo los colores del club River Plate y de la selección de su país, cumple este lunes 50 años. El ‘Burrito’ celebra.
«La gambeta de Ortega, la que nos hizo felices a todos. ¡Felices 50 años, Burrito!»,publicó el club porteño en sus redes sociales como forma de homenajear al nacido en Ledesma, en la norteña provincia de Jujuy, que llegaría a Buenos Aires destacando por su estilo creativo, donde frecuentaban los regates, los cambios de ritmo y su movilidad y pegada.
«Allí el piso era tan caliente que las zapatillas se pulverizaban, entonces había que aprender a jugar descalzo. Muchas veces era más sencillo llevar la pelota bien pegada al calzado, engañar con el cuerpo y dejar rivales en el camino que hacer un pase en el que el balón perdía dirección», publicó la Federación Internacional de Fútbol Asociación (FIFA) en un texto publicado este lunes en su honor.
Tras tener ofertas para equipos como Independiente de Avellaneda y Boca Juniors, el ‘Burrito’ se decantó finalmente por el club de sus amores: River Plate.
«Jugué muy poco, y me dijeron que me iban a llamar… Volví a mi pueblo y un día llegó una carta desde River para decirme que tenía que presentarme. Imaginate mi emoción», declaró el exjugador en una entrevista con la cadena ESPN.
Por su talento innato, Ortega pasó poco tiempo en la cantera Millonaria y debutó con 17 años en el club entrenado por uno de los mayores ídolos de la entidad de Núñez, Daniel Passarella, con quien ganó el Torneo Apertura de ese año.
El enganche se convirtió por su estilo en uno de los mejores jugadores de fútbol del país, y en 1994 hizo historia para el equipo cuando anotó uno de los goles que le dieron la victoria a River en el ‘Superclásico’ contra Boca en casa del Xeneize, que supuso la primera victoria Millonaria en territorio bostero en ocho años.
En esos años, Ortega consiguió levantar diversos títulos, entre ellos 5 títulos nacionales, el Torneo Apertura de 1991, 1993, 1994, 1996 y 1997, además de una Copa Libertadores en el año 1996, la segunda en la historia de River -que ya había ganado en 1986-.
Después, tendría un periplo europeo, en el que pasaría por el Valencia español y los italianos Sampdoria y Parma, para regresar a la que siempre fue su casa tres años después y formar un ataque de ensueño junto a Juan Pablo Ángel, Javier Saviola y Pablo Aimar, que sería recordado como los ‘Cuatro Fantásticos’.
Tras ganar tres títulos más de la Primera División argentina, uno de ellos con Newell’s Old Boys, el ‘Burrito’ se retiraría oficialmente en 2012 en el club Defensores de Belgrano, de la tercera división nacional.
Con la selección nacional Ortega también mostró su dominio de conceptos como la vaselina, llegando al combinado con sólo 20 años en el Mundial de Estados Unidos de 1994, tras la expulsión de Diego Armando Maradona por dar positivo en un control antidopaje.
De hecho, el atacante tuvo la difícil tarea de heredar la ’10’ cuando Pasarella tomó las riendas de la ‘Albiceleste’ y se erigió en uno de los máximos exponentes del fútbol nacional.
De entre todas sus actuaciones destaca el duelo en octavos de final contra Inglaterra en la Copa del Mundo de Francia en 1998 que se llevó Argentina en los penaltis y en el que Ortega fue el mejor jugador sobre el terreno de juego.
Pese a no conseguir tocar metal con la absoluta, el jugador aún así tuvo un paso destacado ganando la plata olímpica en los Juegos de Atlanta 1996.
Su estilo único e irrepetible le convirtieron en uno de los favoritos allá donde jugó, un estilo en peligro de extinción que se llevaba las miradas de seguidores y contrarios.