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Serán seis los clasificados de manera directa al Mundial y lo ideal es que la bicolor pueda formar parte de ese grupo. Haber quedado en quinto lugar en las dos últimas Eliminatorias aumenta la ilusión por alcanzar esa posición otra vez; pero el contexto ahora es diferente y el nivel de los rivales creció. Como se sabe, la selección cambió de entrenador: Reynoso reemplazó a Ricardo Gareca y con ello la idea de juego cambió. Es más, desde lo futbolístico, el equipo ya no es el mismo de antes, los jugadores que disputaron el Mundial de Rusia 2018 atraviesan otro presente y no hay referentes en grandes clubes del mundo como sí los hubo en anteriores procesos. En ese sentido, ¿para qué está Perú en estas Eliminatorias?
Como se sabe, Brasil y Argentina son selecciones que están en un nivel superior y, salvo una catástrofe, su presencia en el Mundial 2026 es casi un hecho. El ‘Scratch’ asistió a todas las Copas del Mundo de la historia, ganó cinco mundiales y es el actual subcampeón de América. En tanto, la ‘Albiceleste’ es el vigente campeón del mundo, el actual campeón del continente y tiene a Lionel Messi en su máximo esplendor. Ambas selecciones están un paso por encima del resto y son quienes mejor representan a la Conmebol en la Copa del Mundo.
¿Cómo están el resto de rivales?
Con Brasil y Argentina casi fijos, restan cuatro cupos directos por pelear. Allí aparecen Ecuador, Uruguay y Colombia, quienes también poseen un universo de jugadores amplio a comparación de la bicolor y, a priori, están un peldaño arriba que el equipo de Reynoso. Los dos primeros asistieron a Qatar 2022 y el último quedó fuera del camino incluso por debajo de la selección. Pero nadie quita que son selecciones fuertes y protagonistas en las Eliminatorias. En el mejor de los casos, sumar ante estos rivales puede significar un paso más hacia el Mundial, ya que son rivales directos por la clasificación. Perú ha demostrado que puede dar pelea y es aquí hacia donde debe apuntar.
Sin embargo, el fútbol es impredecible y la selección debe evaluar todos los escenarios posibles. Si a la bicolor no le va bien, apuntar al sexto cupo de manera directa es una posibilidad. Y allí, la competencia estaría contra Paraguay y Chile, selecciones que no fueron al último Mundial y atraviesan un recambio generacional al igual que la bicolor. Por nivel y rendimiento, hay paridad en lo futbolística; pero el desafío está en marcar la diferencia cuando nos toque enfrentarlos de local y visitante.
Por último, alcanzar el repechaje representa el peor escenario posible para tentar la clasificación al Mundial. Quedar en el séptimo sería un retroceso para la selección, ya que en las últimas dos Eliminatorias culminamos en el quinto lugar. Pero aquí el margen de error es mínimo, porque no solo se disputaría el repechaje con Paraguay o Chile, sino también con Bolivia y Venezuela. Estas dos últimas selecciones han crecido en los últimos años y al saber que sus opciones de clasificación aumentaron, la motivación será distinta. Los altiplánicos contrataron a Gustavo Costas como DT y tienen a la altura de La Paz como su aliada para consumar su regreso a una Copa del Mundo desde Estados Unidos 1994; mientras que los llaneros apuntan a la experiencia de sus jugadores internacionales para conseguir su primera clasificación a un Mundial.
En ese sentido, Perú debe apuntar a repetir lo hecho en los dos últimos procesos clasificatorios, donde terminó en el quinto lugar. Mantenerse como el quinto de Sudamérica le daría un cupo directo al Mundial 2026; caso contrario, lo ideal es finalizar en el sexto lugar, que también asegura la clasificación directa. En el peor de los casos, pelear el repechaje es la última opción, pero no asegura un cupo en la cita mundialista. Sea como fuera, la bicolor tendrá unas Eliminatorias difíciles, contra rivales que están al mismo nivel, o incluso más, que el equipo de Reynoso.
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