Se viene, se viene. Para River, el de este jueves a las 21 en Lima será más que un partido por la tercera fecha de la fase de grupos de la Libertadores: representará una muestra de carácter ante 90 minutos que lo pueden dejar al borde de una muy temprana eliminación, con todo lo que eso significaría. Por eso, Martín Demichelis afina en el Camp los últimos detalles de cara a una visita de riesgo para enfrentar a Sporting Cristal...
Desde las 10.30, el plantel tendrá su entrenamiento final en el predio de Ezeiza, en el que el DT definirá la única duda que le queda: ¿pone el esquema que más resultado le viene dando, con cinco volantes, u opta por sumar un punta más? Terminada la práctica, la delegación se alistará para dirigirse al aeropuerto, de donde saldrá el vuelo a Perú a las 14.30. La llegada está programada para las 19.30, mientras que la vuelta, para el viernes a las 15 (arribo a Buenos Aires a las 20).
Calculadora en mano
Para no sufrir, las cuentas dicen que River debe sumar al menos siete de los nueve puntos que le quedan en juego y, en caso de ganar los tres partidos, clasificaría sin problemas. Será clave ver qué pasa en Bolivia un rato antes de su partido en Perú: ganando, el Flu asegura pasaje a octavos, pero si The Strongest llega a dar el golpe, el equipo de Demichelis quedará obligado a sumar o ya no dependerá de sí mismo.
La buena para River en ese marco es que cierra el grupo con dos partidos de local: el 7 de junio recibe a Fluminense y el 27 cierra con The Strongest en el Monumental. Si no pierde en Perú, será un mano a mano con los bolivianos, que ahora tienen dos seguidos en la altura, con Fluminense y el Cristal. Otro ítem a tener en cuenta es la diferencia de gol, que tras la goleada sufrida en Rio de Janeiro hoy le juega en contra (-4) y puede ser un punto extra a la hora de desempatar.