– Es un asunto que merece la mayor gravedad, y quienquiera que participe tiene que ser castigado, pero no execrado. Castigado como una persona que yerra, pero no determina el final de la vida de nadie. Es algo que nosotros, si supiéramos, podríamos hacer algo en sentido preventivo, pero tenemos que ser muy estrictos. Es un daño al fútbol y una cosa muy fea – comentó Fernando Diniz.