Independiente está inmerso en una situación caótica. Los dirigentes lograron cerrar este jueves la contratación de Ricardo Zielinski para que se haga cargo de dirigir al equipo. Sin embargo, la crisis deportiva, económica e institucional que azota al club es de tal magnitud que se desactiva una bomba y aparece otra. Gonzalo Verón, quien le ganó en primera instancia un juicio millonario al Rojo a raíz de una deuda que la institución mantiene con él, recibió este jueves una repudiable amenaza que no sólo lo involucra a él, sino también a su familia.
Al futbolista de 33 años le colgaron un pasacalle en la puerta de su casa. «Verón: te metés con el club, nos metemos con tu familia», decía el cartel que apareció en su domicilio. Al pie del mensaje, apareció una firma anónima: «El socio». A principios de esta semana ya habían aparecido pintadas con esa misma rúbrica. En los portones del estadio hubo dos mensajes en aerosol: «El día que matemos a un dirigente van a dejar de robarnos» y «El domingo ganen o balas para todos». También hubo pasacalles en los predios del club en Wilde y Villa Domínico: «Ganen o mueran», «Háganse cargo, esto es Independiente» y «Esto no es Ra$in». Además, Fabián Doman, quien renunció a la presidencia el martes, le contó a este diario que recibió alrededor de 70 llamados con amenazas de muerte por día en las últimas semanas.
Ahora le tocó a Verón padecer un repudiable acto de intimidación. El jugador está en juicio con el Rojo, ya que en plena pandemia se consideró despedido por falta de pago y quedó con el pase en su poder. El Tribunal Laboral Número 2 de Avellaneda condenó al club a pagarle 2.332.081.796 pesos en concepto de doble indemnización por haberse quedado sin trabajo en plena pandemia. El pasado miércoles, la dirigencia, ya con Néstor Grindetti a la cabeza, presentó un Recurso Extraordinario, por lo que el mencionado órgano judicial, presidido por la doctora Adriana Terlizzi, deberá definir entre este vierne y la semana que viene si la sentencia queda firme o si la causa se eleva a la Corte Suprema de la Provincia de Buenos Aires.
Independiente puso como garantía de pago un comlejo deportivo que posee en Wilde, por lo que si se confirma la sentencia el club deberá pagar o el jugador contará con la potestad de exigir la quiebra de la institución. En términos legales, el club cuenta con el respaldo de la Ley 25.584, de Entidades Ddeportivas en Dificultades Económicas, que se aprobó a mediados del año 2.000 para que las asociaciones civiles no corran riesgo de desaparición. ¿Qué puede pasarle a Independiente si Verón toma esa medida? Una posibilidad es que sea intervenido por la Justicia. La otra es que deba responder con parte de su patrimonio para cancelar la deuda.
“No hay ninguna posibilidad que algún bien de Independiente sea embargado por el caso Verón. Apelamos y entendemos que hubo mala praxis de la gestión anterior”, comentó Grindetti, presidente provisorio, en radio La Red. El Rojo también tiene otra deuda grande que preocupa: América de México ganó un juicio e Independiente debe pagarle 5.700.000 dólares correspondientes al pase de Ccecilio Domínguez, motivo por el que el club se encuenetra inhibido y, de persistir esa condición, podría exponerse a una quita de puntos a futuro. “Vamos a viajar a Mexico para negociar la deuda. Estamos inhibidos”, intentó traer tranquilidad la máxima autoridad de la institución. Los mexicanos hasta ahora se mostraron inflexibles: quieren el dinero cuanto antes.
Ya había recibido amenazas
No es la primera vez que Verón recibe amenazas, aunque nunca fueron de este tenor. Durante el juicio llegó a faltar a algunas audiencias luego de que lo amedrentasen por teléfono e incluso en la calle. Esta vez lo increparon en la puerta de su casa, con un mensaje propio de un accionar mafioso. El jugador está atemorizado por la seguridad de su familia y no se descarta que le pongan una custodia especial para traerles tranquilidad a sus seres queridos.
Viejos tiempos: Gonzalo Verón en Independiente.
