Adil Rami, el capitán del Troyes, ha expresado su frustración por el rendimiento del equipo tras sufrir otra derrota ante el Clermont (2-0) en la Ligue 1. El Troyes ocupa ahora el puesto 18, a siete puntos del puesto 16, que lo dejaría garantizar su supervivencia en la máxima categoría del fútbol francés. Rami cree que algunos de sus compañeros han renunciado a la idea de quedarse y que la actitud del equipo debe cambiar para evitar el descenso.
Hablando a primer vídeo después del partido, Rami dijo “Me importa un carajo, tengo 37 años y mi carrera está acabada”. También expresó su preocupación por algunos de sus compañeros de equipo más jóvenes, quienes pueden tener dificultades para recuperarse de la decepción de caer: “No sé si estoy triste por algunos jugadores que están renunciando a sus carreras. Tendrán que cuestionarse a sí mismos. La mentalidad no es buena, y la derrota era lógica”.
Rami también reveló que él y sus compañeros discuten sus errores durante los entrenamientos, pero siente que estas discusiones no se están poniendo en práctica en el campo: “No podemos estar durmiendo en los detalles como este. Lo hablamos, pero tengo la impresión de que en el campo me entra por un oído y me sale por el otro”.
El defensa se mostró especialmente crítico con la actuación del equipo ante el Clermont, al que consideró el mejor equipo de la jornada: “No vimos un equipo que quisiera pelear para mantenerse arriba. Bajamos la cabeza y les dimos el fósforo. no sé por qué No mostramos una buena imagen”. Con el Marsella a continuación para Troyes, Rami sabe que el equipo deberá mejorar rápidamente si quiere tener alguna posibilidad de evitar el descenso.
GFFN | Jorge Boxall