Jordi Mestre, ex vicepresidente deportivo del FC Barcelona y uno de los grandes impulsores de la profesionalización del fútbol femenino azulgrana, sigue de cerca la actualidad del equipo de Lluís Cortés como un socio más. Feliz por el resultado cosechado, lamentó el empate “porque el equipo mereció mucho más”, denunció el arbitraje sufrido en París y lo vinculó al apoyo del PSG a la UEFA la semana pasada tras la creación de la Super Liga Europea.
“Es increíble que el PSG acabara con once futbolistas”, comentó Mestre, que no se mordió la lengua. “El PSG es uno de los equipos que se ha desvinculado de la Superliga. Al Khelaifi se negó a formar parte del nuevo campeonato, dando su apoyo a la UEFA y siendo uno de los principales aliados de Ceferin para que no saliera adelante”, dejó caer Mestre. “Al final a uno le cuesta no malpensar”, indicó a Mundo Deportivo.
Mestre, que está pendiente de poder asistir al Estadi Johan Cruyff para poder ver la vuelta de la semifinal, prosiguió mostrando su indignación: “Fue un escándalo, no solo por los tres penaltis que no pitó la colegiada, también por la dureza que sufrió el equipo”, comentó el empresario. “No se puede tolerar un arbitraje así. Una cosa es jugar con agresividad y la otra es ir a hacer daño. Y la colegiada fue cómplice de todo ello por su permisividad”, añadió señalando a Olga Zadinova, colegiada checa que dirigió la ida de la semifinal de la Women’s Champions League en París.